México descubre enormes yacimientos de litio y petróleo
Así es, México tiene las mayores reservas de Litio del mundo, superando incluso a las que hay en Bolivia, Chile, Argentina, EEUU y Australia.
Aun no se explotan los recursos naturales pero se estima que inicialmente se logre una producción anual de 17 mil 500 toneladas de carbonato de litio para llegar a 35 mil toneladas.
Cabe destacar que este mineral hallado en México se encuentra en estado sólido, muy diferente al que se encuentra en Sudamérica, que está en estado líquido, razón por la cual su coste de producción es más elevado pero no por ello deja de ser un negocio extremadamente rentable.
Se ha concesionado la extracción y comercialización del mineral a empresas canadienses, estadounidenses y a la china Yanfeng Lithium. La participación de los empresarios chinos tiene especial relevancia pues ellos traen la tecnología metalúrgica necesaria para separar el litio de los demás minerales que se encuentran en la roca.
Es importante hacer mención que la tasa impositiva para la extracción de estos recursos naturales va a ser del 50% considerando los impuestos y las prestaciones de ley para los trabajadores; se puede considerar un poco alto el impuesto pero la realidad es que el negocio es muy rentable y aun así los empresarios obtendrán grandes ganancias.
Lo malo del asunto es que los yacimientos se encuentran junto a las zonas boscosas protegidas como reservas naturales de Campo Verde; habrá que tener extremo cuidado en no perjudicar el medio ambiente y que no se realicen trabajos de minería en las áreas protegidas.
Enormes reservas de petróleo
En cuanto al petróleo encontrado, este se ubica en el estado de tabasco, específicamente en el pozo de Quesqui. Se estima que los nuevos depósitos de hidrocarburos generan un mínimo de 500 millones de barriles de crudo. Además, se estima que en otros pozos de la región que están por perforarse se obtengan adicionalmente otros 400 millones de barriles de crudo, lo que en total representaría algo así como 900 millones de barriles de petróleo en reserva y en espera de ser explotados.
Es así como se entiende el por qué del repentino interés del gobierno estadounidense por entrometerse en la política interior mexicana con el pretexto de combatir a los cárteles de la droga mexicanos.
Lo del combate a la delincuencia no es más que el pretexto para intervenir en México y presionar a las autoridades mexicanas para que cedan los derechos de estos nuevos recursos encontrados en grandes cantidades a empresas estadounidenses, que a fin de cuentas es lo que se está haciendo, como ya comenté, pero se está haciendo de manera mutuamente beneficiosa para ambas partes.
Ya de sobra todos sabemos que desde la reforma energética las empresas extranjeras ahora también participan del sector energético en México, tal como podría ser la exploración y explotación de los hidrocarburos.
Pero desde que llegó Andrés Manuel López obrador a la presidencia de México ésta mal llamada reforma energética se ha visto frenada y ahora los nuevos proyectos de Pemex ya no contemplan la participación extranjera, o al menos no en el porcentaje que estimaba el gobierno anterior con su nefasta reforma energética, reforma que entregaba los recursos naturales de México a los poderes extranjeros pero con AMLO esta tendencia se está revirtiendo.
Y aunque la explotación del litio inicialmente se esté concesionando principalmente a empresas extranjeras, la realidad es que se está haciendo de manera adecuada, pues, como ya mencioné, se les está aplicando una tasa impositiva del 50%, una tasa que podría considerarse alta a nivel internacional, pero que sin embargo por tratarse del negocio del que se trata, aun así es muy atractiva para la inversión extranjera, pues no olvidemos que el Litio es la materia prima para los nuevos sistemas de almacenamiento de energía eléctrica, es decir, para las baterías de los teléfonos inteligentes, automóviles eléctricos, celdas solares y todo lo demás que necesite una batería recargable.
Es decir, el litio es el mineral del siglo 21, y de los venideros; razón por la cual su extracción y comercialización es, y seguirá siendo, un negocio extremadamente rentable; así que aunque el gobierno mexicano le imponga a las empresas extractoras de este mineral una carga impositiva del 50%, aun así los empresarios obtienen grandes ganancias; y eso es precisamente lo que intenta obtener Donald Trump con esta nueva intervención en México: apropiarse de estas riquezas y entregarlas a las empresas de su país en condiciones extremadamente ventajosas para ellas.
Esto lo quieren obtener, ya sea con el consentimiento del gobierno mexicano, o sin él, que para eso tienen a los cárteles de la droga, para que les hagan su trabajo sucio y así obtener un pretexto para invadir México y de esa manera controlar esas regiones del país ricas en minerales, minerales como el litio y el oro.
No olvidemos que eso es exactamente lo que han hecho en Siria; es decir, crean un problema pero al mismo tiempo ofrecen una solución, una solución que por supuesto es completamente favorable a ellos.
En siria e Iraq lo que han hecho es crear un grupo terrorista (el Estado Islámico), grupo que después simulan atacar, pero que para lograr este presunto combate contra los radícales realizan una ocupación militar del lugar, con lo que obtienen el completo control de los recursos naturales de esos territorios, tal como están haciendo con el petróleo de Siria; y todavía tienen el descaro de decir que ellos pueden hacer con el petróleo de ese país lo que quieran, es decir, que se lo pueden apropiar simplemente y ya.
Pues eso es exactamente lo que pretenden hacer en México, pero en este caso van a utilizar a sus empleados de los cárteles de la droga mexicanos; para ello ya Donald Trump acaba de decir que los va a designar como agrupaciones terroristas, lo que es el paso previo a una ocupación militar para simular combatirlos pero cuyo objetivo final es apropiarse del litio y del oro del norte de México.
No olvidemos que los EEUU son los principales clientes de los cárteles de la droga mexicanos, y que sin la participación de los grandes bancos de aquel país estos no podrían lavar el dinero producto de esa actividad delictiva.
¿Por qué los EEUU no combaten eficazmente el lavado de dinero producto de la venta de la droga? pues simplemente porque ellos están de acuerdo y los narcotraficantes son en realidad sus empleados.
¿Saben lo que pasó en China y en Afganistán? Pues eso, que los estadounidenses e ingleses invadieron esos países para hacerse con el control del negocio de la venta del opio. Así es, la guerra contra china, conocida precisamente con ese nombre, la guerra del opio, fue exactamente para hacerse con el control de ese negocio, y el principal banco beneficiado con esto fue el banco inglés HSBC (The Hong Kong and Shanghái Banking Corporation).
A raíz de esta guerra, (1839 y 1842, la primera, y entre 1856 y 1860, la segunda) fue que china perdió la soberanía de Hong Kong, soberanía que no hace mucho recuperó.
Pues bien, eso es precisamente lo que ahora pretenden hacer en México, pero en este caso para hacerse con el control de los yacimientos de litio y oro, pues el negocio de las drogas ya lo controlan a través de sus empleados de los cárteles de la droga mexicanos, que de mexicanos no tienen nada, pues estos son unos traidores a la patria y un cáncer para la sociedad mexicana, cáncer que hay que eliminar por el bien de México.
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