La República Islámica será la que determine el castigo que infligirá a los autores del asesinato del científico persa Mohsen Fajrizade.
“El agresor definitivamente será castigado, pero no en su propio terreno de juego”, ha subrayado este sábado Ali Rabiei, portavoz del Gobierno de Irán, en un mensaje emitido en su cuenta oficial de Twitter.
El portavoz persa ha expresado, asimismo, su más sentido pésame al pueblo, a la sociedad científica de Irán y, en particular, a la familia de Fajrizade, asesinado a tiros en una emboscada el viernes cuando viajaba en un vehículo en la localidad de Absard, ubicada en la provincia de Teherán (capital).
Como ha advertido Rabiei en otro tuit, la nación persa se reserva el derecho de dar una respuesta contundente a los autores de este asesinato y la estrategia a seguir se basará en los intereses y la dignidad nacionales.
“Debido a los avatares de ese último mes, los enemigos terroristas persiguen metas como perturbar la tranquilidad de la comunidad, provocar confusión en la estrategia de Irán, amenazar la seguridad de la región y la seguridad global, y esto se debe a los posibles cambios futuros en las políticas internacionales”, ha tuiteado.
Las autoridades del país persa consideran que Estados Unidos y el régimen de Israel están detrás del martirio de Mohsen Fajrizade, director de la Organización de Investigación e Innovación (SPND, por siglas en persa) del Ministerio de Defensa de Irán, y han prometido una “dura venganza” contra los autores de este crimen.
Fajrizade era uno de los cinco iraníes que figuraba en la lista de las 500 personas más poderosas del mundo, elaborada hace años por la revista estadounidense Foreign Policy, y su asesinato se suma al de otros científicos nucleares persas muertos en atentados orquestados por el servicio de inteligencia de Israel (el Mossad) y la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés) de EE.UU.
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