El Departamento del Tesoro de EE.UU. incluye a tres entidades y 13 buques rusos involucrados en el proyecto del gasoducto Nord Stream 2 a su lista de sancionados.
Estados Unidos sancionó el viernes a tres entidades rusas y 13 barcos por participar en el proyecto del gasoducto Nord Stream 2, informó la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés), del Departamento del Tesoro.
Según el informe, el Servicio Federal de Rescate Marítimo, MorSpas, con sede en Moscú, viene el primero en la lista de entidades sancionadas, seguido por MorTransServis, con sede en Kaliningrado (ciudad rusa entre Polonia y Lituania) y el Fondo de Propiedad de Energía y Calor de Samara, todos supuestamente involucrados en la construcción.
Sin embargo, EE.UU. también emitió una licencia para facilitar ciertas transacciones con la compañía de Servicio de Rescate Marítimo, a pesar de las sanciones.
Asimismo, entre otros sancionados se encuentran el buque de tendido de tuberías Akademik Cherskiy, el buque de apoyo Artemis Offshore y el buque de suministro Baltic Explorer; los barcos de salvamento Bakhtemir, Murman y Spasatel Karev, de MorSpas; remolcadores Finval, Kapitan Beklemishev, Narval, Sivuch y Umka; así como los remolcadores que manejan anclas Vladislav Strizhov y Yury Topchev.
El jueves, la Casa Blanca admitió que no ha podido impedir la finalización del oleoducto que había sido “completado en un 95%” cuando el presidente de EEUU, Joe Biden asumió el cargo.
Previamente, el embajador ruso en Alemania, Sergei Netschajew, al visitar el sitio del Nord Stream 2 en Lubmin, había rechazado las visiones hostiles norteamericanas y de algunos países europeos acerca del proyecto energético.
Pero, tales injerencias y presiones de Washington también han levantado la voz del mismo aliado de EEUU, Alemania, que tacha de ilegales las medidas de sanciones de la Casa Blanca contra el proyecto del Nord Stream 2.
El gasoducto Nord Stream 2 es un megaproyecto promovido por Moscú y Berlín, que permitiría a Rusia proveer a Alemania de gas a través del mar Báltico. EE.UU. se opone a dicho proyecto, afirmando que aumentaría enormemente la influencia del país euroasiático en Europa en un momento de creciente tensión entre ambas potencias.
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