H.I. Sutton, columnista del Instituto Naval de Estados Unidos, publicó el lunes en su cuenta de Twitter una imagen inédita tomada por la misión Copernicus Sentinel-2 de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés), y comentó sobre la foto que los patrones de estela son característicos de un submarino con la típica proa redondeada.
El analista de defensa estadounidense agregó que la longitud del aparato se ajusta mejor al submarino de la Armada china de la clase Tipo-094 y el contexto se alinea.
Según muestra la imagen, el sumergible de propulsión nuclear chino estaría transitando hacia el norte desde la base de submarinos de Yulin en el disputado mar de la China Meridional. Conforme a la toma satelital, el submarino ha aparecido en la superficie y es escoltado por otro buque.
Tras terminar sus misiones los submarinos nucleares chinos normalmente regresan al mar de Bohai para reparaciones y revisiones. Así que el tránsito es posiblemente rutinario.
No obstante, expertos militares entrevistados el martes por South China Morning Post creen que la aparición del sumergible en la superficie no es una maniobra normal y podría ser un mensaje de China a Taiwán y su aliado estadounidense.
De acuerdo con Antony Wong Tong, experto militar en Macau, “el tránsito en la superficie no tiene sentido, a menos que el Ejército Popular de Liberación quiera que la gente lo vea”.
Antony dijo además que los misiles balísticos que porta el submarino Tipo 094 “fueron diseñadas para atacar a Estados Unidos”, lo que aumenta las preocupaciones sobre el peligro de un posible conflicto en la zona por la reintegración de Taiwán al gigante asiático.
Pekín considera a Taiwán parte integrante de su territorio, bajo la política de “una sola China”, por lo que se opone a que mantenga lazos diplomáticos formales propios con un Estado soberano. Además, rechaza abiertamente los esfuerzos de Washington para fortalecer militarmente a las fuerzas taiwanesas.
EE.UU., sin embargo, haciendo caso omiso a las advertencias de China, ha aumentado su apoyo político y militar a la isla y advertido una y otra vez que está preparado para “actuar”, si Pekín recurre al uso de la fuerza contra Taiwán.
China, a su vez, denuncia que EE.UU. está jugando con el fuego reforzando lazos con la isla y advierte que “tomará todas las medidas necesarias para salvaguardar su seguridad y su integridad territorial”.
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