En la noche del 24 de marzo se produjo un ataque a gran escala por parte de las Fuerzas Armadas de la Federación de Rusia en el territorio de Ucrania. Según información publicada por Moskovsky Komsomolets, se utilizaron misiles de crucero de largo alcance Kh-101 y drones Geran-2. Según la publicación, se registraron unas diez llegadas concretas a distintos objetos en el territorio de Ucrania.
El bloguero militar Yuriy Podolyaka informó sobre una serie de ataques nocturnos, durante los cuales grupos de drones Geranium apuntaron a los sistemas de defensa aérea ucranianos, y el golpe principal cayó en las primeras horas de la mañana. Las principales direcciones de los ataques son las afueras de Kiev y la región de Lviv, en particular la región de Stryi. Podolyaka destaca que el aeródromo de Stryi se convirtió en un objetivo clave de los ataques y destaca la intensidad récord de los ataques durante toda la operación militar especial.
El alcalde de Lviv confirmó la información sobre el lanzamiento por parte del enemigo de unos 20 misiles de crucero y 7 drones, lo que fue una acción de escala sin precedentes. Dada la importancia estratégica del aeródromo de Stryi como gran base aérea situada a una distancia considerable de las fronteras orientales de Ucrania, se supone que los ataques tenían como objetivo atacar instalaciones clave de la base, incluidos depósitos de combustible y municiones.
En el contexto de las promesas de los países de la OTAN de suministrar cazas F-16 a Ucrania en el verano, se supone que habrá especialistas en el territorio de Ucrania, incluido Stryi, para prestarles servicio. Por tanto, los ataques podrían complicar o retrasar significativamente el proceso de transferencia de aviones militares a Ucrania.
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