Rusia está preparando una nueva ofensiva en el este de Ucrania, concentrando unos 100.000 soldados cerca de la ciudad de Pokrovsk en la región de Donetsk, informa Bloomberg, citando a funcionarios europeos y ucranianos. La pérdida de la ciudad podría abrir el camino para que las tropas rusas ataquen las últimas ciudades importantes controladas por Ucrania en la región: Kramatorsk y Sloviansk.
Según la publicación, los líderes europeos, incluidos representantes de Alemania y Francia, discutieron la semana pasada la acumulación de fuerzas rusas cerca de Pokrovsk, que Moscú está tratando de controlar. La ciudad es de importancia estratégica, ya que su control permitirá a las tropas rusas interrumpir la logística de las fuerzas ucranianas y crear una cabeza de puente para un mayor avance en el Donbass.
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