Con toda propiedad puede decirse, - escribe nuestro colaborador Máximo Relti - que por primera vez en la historia de la humanidad, se ha inaugurado un nuevo tipo de guerra hasta ahora desconocida: la "guerra electromagnética". Tal "mérito" de esta guerrera innovación le corresponde, sin duda, al presidente Donald Trump. A partir de este momento hay que empezarse a preguntar cuántas nuevas "modalidades bélicas" nos tienen reservadas para un próximo futuro.
Según informa el digital galo "Red Voltaire", técnicos militares rusos han iniciado una inspección en profundidad de toda la estructura del sistema de generación de electricidad de Venezuela, así como de la red nacional de distribución.
Según se ha podido constatar de manera definitiva, las reiteradas interrupciones del fluido eléctrico que han terminado paralizando a Venezuela, han sido provocadas a través de un uso combinado de artefactos electromagnéticos acompañado de métodos más clásicos de sabotaje, consistentes en cortocircuitos provocados e incendios terroristas planificados.
Por su parte, el presidente Donald Trump, augurando una hipotética respuesta por parte de los técnicos rusos, ha firmado una «Orden Ejecutiva» (Executive Order) en la que se insta a las agencias federales a preparar a los EEUU ante la posibilidad de que uturos ataques electromagnéticos similares se desarrollen en contra de las principales infraestructuras eléctricas del país. Con la "orden" presidencial el mandatario estadounidense ha aceptado Al menos tácitamente que los «ataques electromagnéticos» no forman parte de un imaginario mundo de ciencia ficción. De las repercusiones sociales y económicas que provoca esta nueva "modalidad belica", podemos encontrar un ejemplo en la catástrofe que han supuesto para Venezuela los ataques dirigidos desde Washington en contra de las estructuras fundamentales de ese país. Los [pocos] muertos no se producen por el efecto explosivo de las bombas, sino por la falta de luz en los hospitales, el desabastecimiento de la población, el caos circulatorio, la falta de agua, etc.
Cuando se produce un "ataque electromagnético", no sólo los supermercados y almacenes pierden por descongelación sus mercancías. También se ven igualmente afectadas las reservas alimentarias domésticas de cada familia, de cada ciudadano. A partir de ese punto podemos imaginarnos cuáles pueden ser las concatenaciónes que socialmente se disparan. Sólo una población prevenida y organizada estará en condiciones de poder hacer frente a la envergadura de este tipo de agresiones.
Con toda propiedad puede decirse que por primera vez en la historia de la humanidad, se ha inaugurado un nuevo tipo de guerra hasta ahora desconocida: la guerra electromagnética. Tal "mérito" le cabe, sin duda, a Donald Trump y su gobierno. Lo sucedido estos semanas en Venezuela nos obliga a cuestionarnos sobre las nuevas modalidades bélicas que usará Washington para doblegar la voluntad de los pueblos rebeldes.
En el video que reproducimos en esta misma página, el conocido periodista Walter Martinez [ex-militar y diplomático], conductor del celebérrimo programa "Dossier" de Telesur, entrevista al doctor Roberto González Cárdenas, general de brigada en reserva activa del Ejército Bolivariano, y magister en Artes militares, que responde a las preguntas sobre los precedentes, el carácter y los objetivos de los sofisticados ataques electromagnéticos que han tenido lugar en Venezuela en el curso de las últimas semanas.
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