"El 30 de agosto, los imperialistas estadounidenses permitieron que una formación de bombarderos nucleares estratégicos B-1B realizara un ejercicio conjunto de ataque contra la República Popular Democrática de Corea junto con combatientes de los gángsteres militares de la 'República de Corea' en el cielo sobre los mares Oriental y Occidental de Corea", afirmó el Estado Mayor de Corea del Norte en un comunicado, según consigna la Agencia de Noticias Central en Pyongyang.
"Para hacer frente a esto, el Ejército Popular de Corea organizó un simulacro de ataque nuclear táctico que simulaba ataques de tierra arrasada contra los principales centros de mando y aeródromos operativos de los gángsteres militares de la República de Corea, [Corea del Sur], el miércoles por la noche", añadieron.
El Ejército norcoreano dijo que el ejercicio "Ulchi Freedom Shield", realizado entre Estados Unidos y Corea del Sur, es una seria amenaza para Corea del Norte, "ya que se realizó de conformidad con el escenario de un ataque nuclear preventivo" y "anunció esto a la prensa y lo avisó en voz alta como una 'demostración de la aplicación de una disuasión ampliada'" contra Pyongyang.
Además, las Fuerzas Armadas del país peninsular confirmaron que habían disparado dos misiles balísticos tácticos hacia el noreste y que llevaron a cabo "correctamente su misión de ataque nuclear mediante ráfagas de aire a una altitud preestablecida de 400 metros sobre la isla objetivo".
El miércoles 30 de agosto, el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur dijo que Corea del Norte había lanzado dos misiles balísticos hacia el mar de Japón, que volaron unos 360 kilómetros antes de caer al cuerpo de agua.
El Ejército añadió que las características detalladas de los misiles estaban siendo analizadas por las agencias de inteligencia de Seúl y Washington.
La oficina del primer ministro japonés, Fumio Kishida, dijo este jueves 31 de agosto que Japón desaprobaba los lanzamientos de misiles balísticos de Corea del Norte.
Tras el lanzamiento, Kishida ordenó que se dedique el máximo esfuerzo a recopilar y analizar información y facilitarla al público, así como que se garantice la seguridad de las aeronaves, embarcaciones y otros activos, y que se tomen todas las medidas posibles de precaución, incluida la preparación para contingencias.
Estados Unidos y Corea del Sur llevan a cabo el ejercicio anual denominado "Ulchi Freedom Shield" del 21 al 31 de agosto. El miércoles 30 de agosto, Seúl y Washington realizaron un ejercicio de aviación en el que participó al menos un bombardero estratégico B-1B.
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