Según informó la agencia siria oficial de noticias, SANA, las llamadas, Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) se llevaron el jueves un transformador de 20 kilovatios de la planta eléctrica en la localidad de Tel Hamis, situada en el noreste de la provincia siria de Al-Hasaka.
El medio, citando a fuentes locales, aseguró que un convoy de seis blindados de Estados Unidos y tres camionetas de las FDS impusieron un toque de queda en la referida localidad con el fin de ocultar el robo a la instalación eléctrica.
El saqueo se perpetró a vista y protección de las fuerzas estadounidenses, tal como indicaron las fuentes.
De hecho, en los últimos años, la milicia FDS, con el apoyo y la participación de Washington, ha saqueado los recursos subterráneos y los cultivos estratégicos de trigo, cebada y el ganado en las áreas donde está desplegada y ha contrabandeado grandes cantidades de los productos robados a los mercados de Turquía y del norte de Irak.
El pueblo sirio se ha quejado de que las constantes redadas de las FDS han generado un estado de frustración e inestabilidad que ha afectado gravemente a sus negocios y sus medios de vida.
El Gobierno de Damasco ha denunciado en reiteradas ocasiones la presencia militar de las fuerzas ocupantes estadounidenses en su territorio, acusando a Washington de pertrechar, entrenar, financiar y armar a las bandas terroristas, a fin de derrocar al legítimo Ejecutivo del presidente sirio, Bashar al-Asad, quien ha prometido una y otra vez arrebatar el país a los terroristas y expulsar a los invasores.
Damasco
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