Así es, el gobierno estadounidense, y el gobierno británico, están tratando de desarrollar métodos que les permitan derribar los misiles hipersónicos de fabricación china y rusa. Recordemos que estas son armas que vuelan a velocidades de cuando menos 5 mach, esto es, 5 veces la velocidad del sonido; sin embargo, los misiles hipersónicos rusos superan por mucho esa velocidad, pues el Kinzhal alcanza velocidades de mach 10, mientras que el Zircón alcanza los mach 9.
Hace unos
días el gobierno de los EEUU realizaba la primera prueba exitosa de su
misil hipersónico; sin embargo, la velocidad de este misil y apenas
alcanza la velocidad hipersónica, pues su velocidad es de tan solo 5
mach; No obstante, esta es la primera prueba exitosa de un prototipo de
misil hipersónico estadounidense (por que este misil testado es sólo
eso, un prototipo), mientras que los gobiernos de Rusia y China ya
dominan esta tecnología desde hace años, con lo que le llevan una
ventaja tecnológica de al menos 20 años a los EEUU, así como a los
británicos; de tal manera que cuando estos países logren dominar la
tecnología hipersónica, tanto Rusia, como china, ya habrán desarrollado
nuevas tecnologías que les permitan burlar los desarrollos
anti-misilísticos que actualmente diseñan los gobiernos estadounidense y
británico a través de sus empresas armamentísticas.
Según dicen
sus especialistas, de EEUU y el reino unido, el punto vulnerable de los
misiles hipersónicos chinos y rusos es su escudo térmico, y, nuevamente
según ellos, es fácil dañar este escudo; sin embargo, una cosa es
dañarlo, y otra muy diferente es poder alcanzarlo; y mientras los EEUU y
los británicos no desarrollen misiles interceptores hipersónicos, jamás
podrán dañar los escudos térmicos de los misiles hipersónicos rusos y
chinos; por lo que quedan a merced de los misiles tanto de Rusia, como
de China.
No olvidemos que actualmente la armada rusa se está
equipando con misiles de crucero hipersónicos Zircón, mientras que las
fuerzas aeroespaciales de Rusia desde hace años que ya disponen del
misil hipersónico antibuque Kinzhal; misil que puede hundir portaaviones
estadounidenses de un solo golpe, pues puede equipar ojivas tanto
convencionales, como ojivas atómicas.
Actualmente ni EEUU, ni
ningún otro aliado de la OTAN, disponen de una tecnología que les
permita derribar, o siquiera detectar, los misiles de vuelo hipersónico,
pues estos misiles debido a sus características intrínsecas van
envueltos en una nube de plasma que los rodea, plasma que absorbe las
ondas de radar, así como cualquier otra señal electromagnética, motivo
por el cual son imposibles de detectar, y mucho menos, de derribar.
Así
que, no importa cuánto cacareen los lideres estadounidenses y
británicos, jamás, o al menos no en muchos años, podrán detectar, ni
derribar, los misiles hipersónicos rusos y chinos; por lo que sus
portaaviones están condenados a la destrucción si es que osan sacarlos
de sus puertos y enviarlos a mar abierto. Así que mejor ni siquiera
intenten acercarlos a las costas de Rusia o china, pues en un santiamén
serían hundidos. Aún a una distancia de 2000 kilómetros de sus costas
(de Rusia y China) no estarán seguros, pues esa es precisamente la
distancia que pueden alcanzar los misiles hipersónicos rusos Kinzhal;
pero si a ése alcance de los Kinzhal le sumamos el alcance de más de
7000 kilómetros de los bombarderos rusos, la zona segura para los
portaaviones de EEUU se extiende a más allá de los 9000 kilómetros de
las costas rusas; distancia que ya no les permite a los buques de guerra
de EEUU y sus aliados atacar el territorio ruso o chino por cualquier
medio, menos con sus aviones embarcados, pues estos apenas y disponen de
una autonomía de 1000 Km.
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