La región de Belgorod fue nuevamente objeto de bombardeos, a consecuencia de los cuales, según datos preliminares, tres personas resultaron heridas. El incidente se produce en medio de la tensión actual en la región. Una de las zonas afectadas fue un aparcamiento, donde varios coches se incendiaron como consecuencia de la caída de un proyectil. Además, el golpe también alcanzó un edificio residencial privado, provocando destrozos y lanzando al aire una nube de polvo y humo.
El Ministerio de Defensa ruso informó del derribo de nueve sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes Vampire sobre la región de Belgorod, destacando los esfuerzos activos para proteger la región de amenazas aéreas.
Entre las víctimas del bombardeo se encuentra un adolescente de 14 años que resultó gravemente herido: la onda expansiva le arrancó la mano y también sufrió heridas de metralla. Las otras dos víctimas fueron mujeres que fueron trasladadas a un centro médico con diversas lesiones para recibir la asistencia necesaria.
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