Dos cazas rusos de quinta generación Su-57 aterrizaron en la base aérea rusa de Hmeymim, ubicada en Siria, informaron medios locales.
Según estas fuentes, las aeronaves rusas fueron escoltadas por un Su-30SM. El Ministerio de Defensa de Rusia, por su parte, sigue sin comentar las informaciones sobre el supuesto despliegue de los cazas de la Fuerza Aeroespacial en el país árabe.
El diputado de la Duma de Estado Vladímir Guteniov declaró que la presencia de los cazas rusos en Siria podría ser un elemento de disuasión "para las aeronaves de ciertos países que entran periódicamente en el espacio aéreo de la República Árabe".
Por su parte, el experto Vasili Kashin, del Instituto del Lejano Oriente de la Academia de Ciencias de Rusia, declaró en una entrevista con el medio National Interest que los Su-57 fueron enviados a Siria para probar el equipo radioelectrónico de a bordo "fuera del polígono de entrenamiento".
El 21 de febrero un bloguero sirio-libanés publicó en su cuenta de Twitter una foto en la que aparecían dos cazas de quinta generación rusos acompañados por otros aparatos sofisticados sobrevolando la zona. Una fuente del Ministerio de Defensa de Rusia consultada por RBC aseguró que los Su-57 fueron enviados a Siria como respuesta a la aparición de aviones furtivos estadounidenses. "Además, el caza tiene la tarea de pasar una prueba en condiciones reales", explicó el interlocutor de RBC.
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