En su primer día realizando su primer ataque real contra objetivos enemigos, el novedoso y carísimo avión caza norteamericano, el F-35, sufre también su primera pérdida al registrarse un accidente dentro de los mismos estados unidos; accidente que se saldó con la destrucción de un avión de estos, afortunadamente el piloto logró eyectarse del aparato y así salvar la vida.
Esto demuestra la "eficacia" del presente avión, eficacia que deja mucho que desear, sobre todo considerando que su debut fue contra posiciones de grupos rebeldes armados en Afganistán, rebeldes que no contaban con ningún tipo de armamento antiaéreo, con lo que el avión no corría realmente ningún peligro; el único peligro real al que se enfrentaba era a si mismo, situación que se comprobó mas tarde con el accidente del F-35 estadounidense, accidente registrado dentro de su mismo territorio durante un ejercicio de entrenamiento.
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