Rusia e Israel mantienen un acuerdo, o mantenían, según el cual cualquier acción militar que vaya a ser emprendida por Israel contra su vecino debe ser notificada previamente, con suficiente tiempo de anticipación, a las autoridades rusas para evitar posibles malentendidos e incidentes imprevistos, tal como fue el caso de ayer.
Pero eso es exactamente lo que pasó, un incidente imprevisto por falta de comunicación, ¿aunque cabe preguntarse si realmente fue imprevisto?
La cuestión es que Israel lanzó un ataque coordinado con Francia para supuestamente destruir objetivos sirios en territorio de ese mismo país, pero resulta que el ataque se realizó justo en la provincia donde se encuentran las instalaciones de la base aérea rusa de Hmeymim.
Además, ni París ni Tél Aviv comunicaron jamás a las autoridades rusas sus planes, así que realizaron el ataque sin previo aviso y conscientes de que sobre la zona sobrevolaban aeronaves rusas de reconocimiento y recolección de datos de inteligencia, además de otro tipo de aeronaves civiles y militares. Así, los israelíes y franceses iniciaron el ataque sin consultar con Moscú y además conscientes de que ponían en serio peligro a las aeronaves rusas, o de cualquier otro país, de ser alcanzadas por fuego cruzado entre los misiles lanzados por ellos y los lanzados por las baterías antiaéreas sirias en respuesta al ataque.
De esta manera sucedió lo que tenia que suceder, el avión ruso fue alcanzado por un misil de una batería antiaérea siria S-200.
Pero la situación no es tan simple como parece; resulta que los israelíes y los franceses escogieron el preciso momento en que el avión ruso realizaba un sobrevuelo sobre la zona preparándose para aterrizar para realizar el ataque, de esta manera utilizaron al Il-20 como escudo para no ser alcanzados por el fuego de las baterías antiaéreas.
Así es, tanto franceses como israelíes sabían perfectamente que las baterías antiaéreas sirias responderían y que el avión ruso sería ubicado como el primer objetivo a derribar al tener este una mayor superficie que los cazas F-16 y los misiles lanzados por Francia. No es que los sirios derribaran deliberadamente el avión ruso, sino, mas bien, trataron de repeler el ataque, pero los misiles que iban dirigidos contra los cazas israelíes escogieron como blanco al avión ruso al ser este de mayor tamaño y, por lo tanto, tener una huella mas grande al radar y a los sistemas de detección optoelectrónico que utilizan los misiles interceptores para ubicar su blanco.
De esta manera, era lógico suponer que los misiles interceptores se dirigirían hacia al avión ruso más que hacia los cazas israelíes y misiles franceses, y eso lo sabían perfectamente en Israel y Francia, por eso escogieron ese preciso momento para realizar el ataque.
Además, este avión ruso era un escollo en sus planes, pues la función de esta aeronave era precisamente la de anticipar un ataque contra suelo sirio o contra la misma base rusa, pero en momentos que se comenzó el ataque el avión Ilyushin ya se dirigía hacia pista para aterrizar, estaba realizando las últimas maniobras para dirigirse hacia la pista.
Así que, en ese momento, prácticamente estaba indefenso y además tenia ya apagados los sistemas de detección de amenazas, es decir, los radares y demás sistemas de vigilancia, así que no vio venir el ataque, ni de los franceses ni de los israelíes, ni de las baterías antiaéreas, por eso es que de súbito desapareció de los radares y no hubo comunicación previa pues el suceso los agarro de imprevisto, de otra manera hubieran lanzado la alerta hacia sus compañeros para que las baterías antiaéreas rusas derribaran los misiles interceptores y los cazas israelíes.
Además, se entiende que la velocidad que puede alcanzar el Ilyushin no se compara a la que pueden alcanzar los F-16 israelíes, de esta manera se entiende que el objetivo más fácil para los misiles interceptores era precisamente el avión ruso, cosa que aprovecharon los pilotos israelíes para escapar y lograr el derribo del avión ruso.
De esta manera Rusia perdió uno de los medios que utiliza frecuentemente para alertar al gobierno de Damasco sobre un ataque inminente y de esta manera prevenir a sus fuerzas antiaéreas, pues además de prevenirlos, el avión derribado cumplía la función de guía de tiro, es decir, mandaba los datos directamente a las baterías antiaéreas sirias para que estas pudieran derribar los misiles agresores, pero en esta ocasión, como ya lo dije, el avión ruso ya tenia apagados su sistemas de vigilancia pues ya se disponía a aterrizar, así que fue agarrado de sorpresa; pero los que si vieron el momento justo cuando fueron lanzados los misiles por la fragata francesas, así como el ingreso de los cazas israelíes al espacio aéreo sirio, fueron los sistemas antimisiles S-300 y S-400 que Rusia tiene ubicados en la base aérea de Hmeymim, así como otros sistemas de alerta temprana que Rusia tiene ubicados dentro del territorio de la federación rusa; cosa que hace aun mas sospechoso este caso, pues los militares rusos supieron perfectamente del ingreso de los cazas israelíes pero no hicieron nada, los dejaron acercarse hasta una zona muy cercana a la base aérea rusa, máxime sabiendo que un avión de gran tamaño se disponía a aterrizar en la misma; y era lógico suponer que los cazas israelíes se dirigían a realizar un ataque con lo que ponían en serio peligro a la aeronave rusa; pero aun así no mandaron cazas a interceptar a los israelíes para evitar que estos pusieran en peligro a la base aérea o a las aeronaves rusas.
Y entonces sucedió lo que tenía que suceder: que el avión ruso Ilyushin fuera derribado por fuego amigo.
Lo que cabe preguntarse es si los sistemas antiaéreos sirios no tienen sistemas de identificación amigo-enemigo (IFF por sus siglas en inglés, Identification Friend or Foe) coordinados con las fuerzas militares rusas, pues de otra manera no se entiende por que los misiles interceptores identificaron al avión ruso como un enemigo; esto quiere decir que los sistemas antiaéreos sirios carecen de tal sistema, o al menos no está coordinado con la parte rusa.
Aunque a partir de ahora surge la pregunta: ¿qué hará Rusia para prevenir nuevos incidentes como el presente?
Además, todavía queda pendiente el asunto de como va a compensar Israel a Rusia por este derribo del avión. Por el momento las autoridades castrenses rusas ya han declarado que toda la responsabilidad recae sobre las autoridades israelíes, pues utilizaron al avión ruso como escudo antiaéreo, y que además fue una acción deliberada y premeditada, cosa en la que aparentemente no está de acuerdo el presidente ruso pues ha salido a decir que lo del derribo del avión fue un “incidente fortuito” y que no hubo intención de tal cosa por parte de nadie, ni por parte de Israel ni por parte de las autoridades sirias, pero sus militares lo desmienten y aseguran que fue una acción deliberada y premeditada. Así que lo que prosigue es exigir a Israel una reparación del daño e impedir que se sucedan nuevas incursiones ilegales por parte de cazas israelíes sobre cielo sirio.
Habrá que esperar a ver qué decisión toma finalmente Moscú respecto a este asunto: si se tomará una postura como la expresada por Vladimir Putin, o una más acorde a lo expresado por las autoridades castrenses rusas. Si es lo segundo, entonces las incursiones ilegales de Israel sobre territorio y cielos sirio tienen los días contados.
Israel y Francia no notificaron a Rusia de lo que planeaban hacer precisamente para evitar que se impidiera su realización, pues su intención era utilizar al avión ruso como escudo y lograr de esta manera que este fuera derribado, mandando con ello un mensaje claro a Moscú: que ellos no están dispuestos a admitir la derrota y que continuarán hasta el final.
Además, esto es una burla para las autoridades rusas, pues se mostraron muy permisibles al no hacer nada para evitar que se pusiera en riesgo a sus fuerzas armadas desplegadas en territorio sirio, pues viendo que los cazas israelíes se dirigían hacia las inmediaciones de la base aérea rusa no mandaron cazas a interceptarlos para impedir que estos incursionaran dentro de la zona de seguridad de la misma, máxime sabiendo que un avión ruso de gran tamaño se disponía a aterrizar y que se exponía a un peligro inminente si los cazas israelíes atacaban en ese momento. Es más, luego del derribo del avión ni así mandaron cazas a interceptar a los aviones israelíes, cosa que se debió hacer: obligarlos a aterrizar en la base rusa para dar explicaciones de lo sucedido y así tener un medio con que presionar a las autoridades israelíes ha hacerse responsables de lo sucedido.
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