A pesar de las advertencias de los economistas, el presidente de EE.UU., Donald Trump, insiste en que la economía de su país funciona bien.
“Estamos muy lejos de la recesión”, afirmó el martes Trump en declaraciones a los periodistas en la Casa Blanca, haciendo caso omiso a varios indicadores que alertan de un posible frenazo a corto plazo de la mayor economía mundial.
Sin embargo, el mandatario estadounidense sostuvo que está contemplando todas las estrategias y que podría considerar un recorte de los impuestos a las ganancias de capital indexándolos a la inflación.
“Hemos estado hablando de la indexación durante un largo periodo y a mucha gente le gusta (…) Si lo hacemos o no, no será por la recesión”, agregó el mandatario estadounidense.
que cree que esto no requiere de la aprobación del Congreso, como otras medidas que él prefiere, como un recorte a los impuestos a la nómina.
Según una encuesta publicada el domingo por la Asociación Nacional de Economistas de Negocios (NABE, por sus siglas en inglés), casi tres cuartas partes de los economistas estadounidenses esperan una recesión económica en el país para el año 2021 debido a las políticas comerciales de Trump.
En este mismo contexto, el diario local The Washington Post informó el lunes que la Administración Trump estudia varias medidas ante el temor de una eventual recesión a fin de estimular la economía, entre ellas una bajada temporal de los impuestos de los salarios para mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores.
Mientras tanto, el rotativo aventuró que Trump podría suspender los nuevos aranceles impuestos a las importaciones chinas en el contexto de la guerra comercial con Pekín.
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