El presidente ruso, Vladimir Putin, llegó a Sarov la noche anterior, donde, según varias fuentes, mantuvo una reunión secreta, de la que no se informó oficialmente. Presumiblemente, en la reunión se discutieron las pruebas del misil de crucero intercontinental Burevestnik con una planta de energía nuclear y la posibilidad de su adopción en 2025.
Los canales locales de Telegram informaron que las pruebas del misil Burevestnik ya se discutieron en el aeropuerto. Según ellos, se trataba de avances en el desarrollo y perspectivas para la adopción de este misil de crucero de propulsión nuclear.
No ha habido comentarios oficiales del Kremlin sobre el contenido de la reunión y sus objetivos. Sarov, una ciudad cerrada y un centro clave para la investigación nuclear de Rusia, sigue siendo un lugar de mayor secreto, lo que alimenta la especulación sobre posibles discusiones relacionadas con los últimos desarrollos militares.
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