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domingo, 9 de julio de 2017

Misil Sniper: la pesadilla de los vehículos blindados de EEUU




Los tanques rusos T-72B3 en Siria utilizaron por primera vez en julio los misiles guiados 9K119M Refleks-M (AT-11 Sniper, según la clasificación de la OTAN), informa el diario ruso Svobodnaya Pressa.

Estos misiles de nueva generación no solo son capaces de atacar tanques, sino también objetivos aéreos a baja altura, así como infraestructura y contingentes enemigos gracias a los componentes termobáricos y al alto poder explosivo incendiario del proyectil.

En cuanto a la modificación antitanque de este misil —creado por la Oficina de Diseño de Tula y puesto en servicio en la década de los 90— es capaz de penetrar el blindaje de hasta 900 milímetros de ancho, tiene un alcance de hasta 5.000 metros y una velocidad máxima de 400 metros por segundo. Además de esto, cuenta con su propia mira láser. De este modo, cualquier tanque equipado con los misiles Refleks será capaz de atacar los vehículos blindados enemigos no equipados con misiles —por ejemplo, los M1 Abrams estadounidenses— recorriendo una distancia de entre 1,5 y 2 kilómetros.

Por su parte, los proyectiles guiados rusos 9M119F1 —que también forman parte del Refleks-M— tienen un alcance de hasta 3,5 kilómetros, al mismo tiempo, a diferencia de los misiles, no tienen motores y, de este modo, son imposibles de detectar por los radares térmicos y de ondas ultravioletas. La falta de motor aumenta considerablemente la eficacia del 9M119F1.

Estos misiles rusos solo tienen competidores en Israel, Francia y Corea del Sur. Así, los proyectiles israelíes Lahat, de 120 milímetros, también cuentan con una mira láser; no obstante, tienen un menor alcance y solo son capaces de penetrar 800 milímetros de blindaje de la parte superior —la menos protegida— del tanque. En cuanto a los proyectiles franceses Polynege, también de 120 milímetros, serán instalados en los tanques galos Leclerc en un futuro próximo. Tienen un alcance de hasta 8 kilómetros a una altura de hasta 650 metros. A su vez, los misiles guiados surcoreanos con ojivas infrarrojas autoguiadas KSTAM son capaces de atacar objetivos a una distancia de hasta 8 kilómetros y a una altura máxima de 350 metros.

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