El Departamento de Estado de EE.UU. cancela las exenciones que permitían a países colaborar con Irán en el ámbito nuclear, y sanciona a dos científicos iraníes.
“Hoy anunciamos el fin de las exenciones a las sanciones para todos los proyectos nucleares de Irán”, ha indicado este miércoles el secretario estadounidense de Estado, Mike Pompeo, en un mensaje difundido en su cuenta de la red social Twitter.
Conforme a Pompeo, la decisión responde a la “arriesgada política” de Irán de dar pequeños pasos nucleares con el objetivo de presionar a EE.UU. para que elimine las sanciones antiraníes, algo que estipula el acuerdo nuclear, del que Washington se salió en mayo de 2018.
Con tal medida, los países que todavía forman parte del Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o J-C-POA, por sus siglas en inglés), nombre oficial del pacto nuclear, —a saber: Alemania, Francia, el Reino Unido, China y Rusia— se arriesgan a ser sancionados por Washington si siguen con sus cooperaciones nucleares con el país persa.
Asimismo, en otro tuit, Pompeo ha anunciado sanciones contra dos científicos iraníes relacionados con el programa de energía nuclear del país persa.
Horas antes, en la misma jornada, el diario estadounidense The Washington Post había informado de la intención de EE.UU. de poner fin a las exenciones a la cooperación internacional para la reconstrucción del reactor de agua pesada de Arak y el suministro de uranio enriquecido para el reactor de investigación de Teherán (capital iraní).
No obstante, señaló que la Administración del presidente estadounidense, Donald Trump, ampliaría, durante un plazo de 90 días, una exención separada que cubre la cooperación internacional sobre la planta nuclear de Bushehr, situada en el suroeste de Irán.
EEUU, tras acusar a Teherán de violar el acuerdo nuclear, abandonó el convenio y volvió a imponer a Irán las sanciones que había levantado. Eso mientras la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) ha constatado en varias ocasiones el pleno respeto del país persa al pacto, algo que confirma que sus actividades nucleares tienen fines pacíficos.
Horas antes, en la misma jornada, el diario estadounidense The Washington Post había informado de la intención de EE.UU. de poner fin a las exenciones a la cooperación internacional para la reconstrucción del reactor de agua pesada de Arak y el suministro de uranio enriquecido para el reactor de investigación de Teherán (capital iraní).
No obstante, señaló que la Administración del presidente estadounidense, Donald Trump, ampliaría, durante un plazo de 90 días, una exención separada que cubre la cooperación internacional sobre la planta nuclear de Bushehr, situada en el suroeste de Irán.
EEUU, tras acusar a Teherán de violar el acuerdo nuclear, abandonó el convenio y volvió a imponer a Irán las sanciones que había levantado. Eso mientras la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) ha constatado en varias ocasiones el pleno respeto del país persa al pacto, algo que confirma que sus actividades nucleares tienen fines pacíficos.
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