Una serie de cohetes ha impactado este lunes una base militar de Estados Unidos en la provincia de Deir al-Zur, en el este de Siria.
Según informa el canal de Telegram de Saberin News, ocho cohetes han alcanzado la instalación estadounidense dentro del campo petrolífero de Al-Omar, una de las bases más grandes de las tropas de EE.UU. en el país árabe.La fuente agrega que columnas de fuego y humo se elevan desde el campo petrolífero, mientras los helicópteros norteamericanos sobrevuelan la zona.
La cadena libanesa de noticias Al-Mayadeen ha detallado que el ataque causó daños materiales y varios vehículos blindados que estaban aparcados en la zona quedaron destruidos.
Los medios de comunicación no han especificado el origen del ataque y, hasta el momento, ningún grupo se ha responsabilizado del hecho.
La cadena de televisión catarí Al-Jazeera puso de relieve que después del ataque, los aviones de la coalición de EE.UU. han disparado varios morteros, sin embargo, el canal Telegram de UNews precisa que la coalición norteamericana ha bombardeado el área alrededor de la ciudad estratégica de Al-Mayadin (en Deir al-Zur).
La madrugada de esta misma jornada, los cazas estadounidenses atacaron dos lugares próximos a la ciudad de Al-Bukamal en Deir Ezzor, fronteriza con Irak, dejando un niño muerto y tres civiles heridos. Además, arremetieron contra las posiciones de las Unidades de Movilización Popular de Irak (Al-Hashad Al-Shabi, en árabe) en la región de Al-Qaim, en el oeste de Irak, cerca de la frontera con Siria, y cuatro miembros de esta movilización iraquí cayeron mártires.
En reacción, Kataib Sayed al-Shuhada —que forma parte de Al-Hashad Al-Shabi— ha advertido que, desde ahora, en la guerra contra las tropas de ocupación estadounidenses no se observará límite alguno y que las fuerzas de la movilización iraquí apuntarán a las aeronaves hostiles en sus cielos.
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