La portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, comentó la reciente filtración accidental de unos documentos clasificados de la Defensa británica.
A través de su canal de Telegram, Zajárova consideró el incidente como "otra provocación" británica, sumada a "una porción de mentiras para encubrirla".
"Los 007 ya no son los mismos", ironizó la portavoz de la diplomacia rusa.
Zajárova, además, dirigió al Parlamento británico una "pregunta misteriosa".
"¿Por qué necesitaríamos 'ciberpiratas rusos' si hay paradas de autobús británicas?", escribió la vocera de la Cancillería rusa.
El 27 de junio, la BBC informó que un ciudadano, que prefirió permanecer en el anonimato, se había puesto en contacto con el medio tras encontrar unas 50 páginas de información secreta en una parada de autobús. Los papeles, hallados en el condado de Kent (Reino Unido), contenían detalles sobre el destructor HMS Defender y el Ejército británico.
Entre los documentos, había uno en el que se hablaba de la posible reacción rusa al paso del HMS Defender frente a la costa de Crimea. Los papeles revelan que la misión se llevó a cabo con la expectativa de que Rusia pudiera responder agresivamente.
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