El cohete Soyuz fue lanzado con éxito desde el cosmódromo Vostochny, llevando el primer vehículo lunar en la historia de la Rusia moderna, Luna-25. Este fue un evento histórico para la cosmonáutica rusa, ya que el último lanzamiento similar a la luna se llevó a cabo en 1976.
El cohete y todos sus sistemas funcionaron normalmente. La etapa superior se separó con éxito de la tercera etapa y llevó a la nave espacial Luna-25 a la trayectoria de vuelo requerida hacia el satélite natural de la Tierra.
El lanzamiento del nuevo vehículo lunar simboliza el renacimiento del interés de Rusia en la exploración espacial. Recordemos que la última misión Luna-24 fue lanzada durante la Unión Soviética, y desde entonces la exploración de la Luna ha sido suspendida.
El propósito de la nueva misión Luna-25 es probar tecnologías de aterrizaje suave en la superficie lunar, estudiar la exosfera y analizar el suelo lunar. Estos datos permitirán una mejor comprensión de las condiciones en la Luna, lo que sin duda será útil en futuras misiones interplanetarias y posibles vuelos tripulados al satélite de la Tierra.
Expertos y científicos esperan que la finalización exitosa de la misión sea el punto de partida para una nueva era de exploración espacial, en la que Rusia ocupará uno de los primeros lugares en el ámbito internacional.
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