La unidad de marines estadounidense desplegada para actuar en el norte de África viajará de España a Italia. 850 operarios y ocho aeronaves saldrán de la base de Morón de la Frontera, su hogar en los últimos ocho años.
De España a Italia. Ese es el viaje que realizan los operativos de la Fuerza de Reacción del Cuerpo de Marines encargados de intervenir en situaciones de crisis en África. La tropa estadounidense abandona la base de Morón de la Frontera (Sevilla) para establecerse en Vicenza, situada al norte del país transalpino. En total, 850 marines y ocho aviones, seis MV-22B Osprey de despegue vertical y dos C-130J Super Hércules de transporte, dejarán la península ibérica.
El cambio de sede no responde a ningún inconveniente político, sino a la reestructuración interna del Pentágono, según ha confirmado El País. La salida fue comunicada en 2020 al Ministerio de Defensa, organismo con el que Washington desea seguir colaborando.
Este contingente militar llegó a España en abril de 2013. El despliegue se produjo a raíz del asalto al consulado estadounidense de Bengasi (Libia) el 11 de septiembre de 2012. Washington decidió que sería útil tener un cuerpo de élite a pocas horas del norte de África en caso de tener que intervenir de manera rápida, por ejemplo, para realizar operaciones de evacuación. Así, una Fuerza Especial Aire Tierra de Respuesta de Crisis del Cuerpo de Marines aterrizó en el sur de Europa, con permiso del Gobierno español.
De forma anual, la autorización era renovada, hasta que se hizo permanente. Estados Unidos solicitó incrementar la cifra de soldados a 2.200 y de aviones a 17, aunque jamás se alcanzaron dichas cantidades. No obstante, la operación obligó a España a reformar el convenio con el país norteamericano sobre el número máximo de tropas en territorio nacional. Este acuerdo expiró en mayo de 2020, pero se prorrogó para dar tiempo al recién llegado presidente, Joe Biden.
La salida de la unidad de élite de marines es la reducción más significativa de efectivos estadounidenses en España en lo que llevamos de siglo. La última partida de importancia se produjo en 1992, cuando los cazas F-16 del Ala 401 despegaron de la base de Torrejón de Ardoz (Madrid).
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