Exdiplomáticos, exfuncionarios y expertos estadounidenses dicen que una incursión militar rusa en Ucrania es una gran posibilidad en el futuro cercano, enfatizando que Putin tiene una ventaja significativa sobre Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en un momento en que muchos países occidentales están plagados de desorden.
Putin se toma “muy en serio” tomar medidas contra Ucrania; “de una forma u otra, quiere que Ucrania sea neutralizada”, sostuvo la exasesora de la Casa Blanca para Rusia Fiona Hill, en declaraciones a la revista norteamericana Business Insider publicadas el viernes.
Hill también señaló que, de hecho, actualmente Rusia ve a Occidente muy débil pues considera este momento una “oportunidad increíble” para explotar.
“Existe un gran riesgo de actividad militar rusa en Ucrania en los próximos meses. Todas las señales apuntan a un importante desarrollo de la capacidad militar”, dijo a su vez, Ivo Daalder, la embajadora de EE.UU. ante la OTAN de 2009 a 2013.
Conforme alegó Daalder, la retórica de Moscú en este momento está “diseñada para aumentar las tensiones” mientras “culpa a Estados Unidos y la OTAN por cualquier posible escalada”.
Ucrania y sus aliados occidentales afirman que Rusia ha desplegado más de 90 000 efectivos cerca de sus fronteras, acusándola de preparar un ataque para principios de 2022 contra Kiev. No obstante, el Kremlin rechaza tales acusaciones y señala que Ucrania atiza las tensiones en la región con el fin de resolver “por la fuerza” el conflicto en el Donbás, desatado en 2014 entre los separatistas y el Ejército ucranio.
En este mismo contexto, Moscú denunció el jueves un aumento de las acciones ofensivas de las fuerzas ucranianas en Donbás —región independentista del este de Ucrania y limítrofe con Rusia— criticando que tratan de usar la potencia de fuego occidental para someter a las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk (RPD) y Lugansk (RPL) con la fuerza militar.
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