“Desde el inicio de la operación especial, las Fuerzas Armadas rusas han destruido 1146 instalaciones de la infraestructura militar de Ucrania”, informó el lunes el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Igor Konashenkov.
Las instalaciones destruidas incluyen 31 puntos del comando y centros de comunicaciones, 81 sistemas de misiles de defensa aérea S-300, Buk M-1 y Osa, además de 75 estaciones de radar, detalló.
Asimismo, Konashenkov agregó que “un total de 311 tanques, otros vehículos militares blindados, 42 aviones y helicópteros (incluidos algunos en tierra), 51 sistemas de cohetes de lanzamiento múltiple, 147 armas de artillería de campaña y morteros, y 263 vehículos especializados” habían sido destruidos durante la operación militar rusa.
Ucrania habla de entre 4500 y 5300 fuerzas rusas muertas
Por su parte, los funcionarios ucranianos afirmaron que, hasta ahora, han muerto entre 4500 y 5300 soldados rusos, aunque estas cifras no han sido confirmadas oficialmente.
Asimismo, señalaron que habían eliminado 29 aviones, 191 tanques, 74 armas, 816 los vehículos acorazados de combate, 21 sistemas Grad de lanzamiento múltiple de misiles, 291 vehículos y un sistema de misiles antiaéreos Buk.
Después de unas semanas tensas entre Rusia, Ucrania y los países occidentales, el mandatario ruso anunció el jueves su decisión de lanzar “una operación militar especial” en la región del Donbás (este de Ucrania) para defender a los ciudadanos de las autoproclamadas Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, cuyas autoridades habían solicitado a Rusia ayuda para repeler las agresiones del Gobierno ucraniano y evitar una catástrofe humanitaria.
Moscú defiende que la desmilitarización de Ucrania es el único camino que queda para evitar una guerra en Europa, pues EE.UU. y sus aliados occidentales han rechazado las propuestas rusas sobre cuestiones de seguridad global, y Kiev se ha negado a implementar los acuerdos de Minsk.
De momento, la delegación de Rusia se encuentra en Bielorrusia para sostener conversaciones con los ucranianos en la ciudad bielorrusa de Gomel.
Por su parte, el Kremlin ha advertido a Ucrania que las operaciones militares rusas no se van a detener durante las previstas conversaciones de las delegaciones rusa y ucraniana.
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