Un experto cree que Turquía, consciente de las amenazas de la OTAN, busca liberarse del dominio del imperialismo y girar hacia el mundo de polaridad.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, se ha reunido este lunes en Sochi, sur de Rusia, con su homólogo ruso, Vladímir Putin, para discutir la posibilidad de renovar el acuerdo de grano, que fue suspendido el pasado mes de julio. Erdogan ha propuesto nuevas iniciativas para reactivar el pacto.En la cita, Putin ha dejado claro que, si se cumplen sus condiciones —es decir se apliquen totalmente los acuerdos que contienen el levantamiento de las restricciones a la exportación de productos agrícolas rusos —, su país está dispuesto a exportar cereales ucranianos por el mar Negro.
Al abordar los esfuerzos de Turquía para resolver la crisis de granos en una entrevista concedida a HispanTV, el analista internacional IñaKi Gil de San Vicente, cree que Ankara está desempeñando un papel clave en la resolución de “una injusticia no solamente contra Rusia, sino contra todos los países que comercian granos, fertilizantes, alimentos básicos y otros productos necesarios con Rusia, que están siendo sujetos a las sanciones occidentales”.
El politólogo opina que Turquía, al fungir como mediador en el acuerdo de granos, busca jugar cada vez más funciones en las ecuaciones internacionales, con el objetivo de “liberarse del dominio” de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Ankara “intenta independizarse de la OTAN, consciente de que la OTAN puede dar un golpe de Estado o pretende dar un golpe en Turquía para reinstalar la dictadura militar allí. Turquía quiere girar hacia el mundo de polaridad, hacia las relaciones con Eurasia”, ha detallado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario