Israel destruye con aviones F-35 sistemas antiaéreos sirios S-300, entre otras armas, que tenían como destino Hezbolá

Según cierto informe de un periodista francés, Georges Malbrunot, que trabaja para el periódico Le Figaro, Israel habría utilizado sus recién adquiridos aviones caza F-35 para atacar instalaciones militares en Siria, concretamente el aeropuerto militar de Mezzeh, para destruir sistemas de misiles S-300 rusos, entre otro tipo de armamento, que serían transferidos al grupo militar libanés Hezbolá.

Esta información tendría por fuente el servicio de inteligencia exterior Francés (en francés: Direction générale de la sécurité extérieure, DGSE).

Por esas fechas los servicios internacionales de noticias habían reportado el ataque en dos ocasiones diferentes a dichas instalaciones militares en Siria, cerca de Damasco.  En esos medios se decía que Israel había utilizado misiles de crucero guiados para realizar el ataque, en vez de utilizar sus F-16, aviones a los que comúnmente se les asignan dichas tareas.

I- Pour la 1ère fois, Israël a utilisé des chasseurs F-35 la nuit du 12-13 janvier pour frapper Damas, estiment les services rens français. pic.twitter.com/FukkAZuYGC

— Georges Malbrunot (@Malbrunot) 7 de marzo de 2017

Se especulaba que hubiesen sido misiles guiados por que no había evidencia de que hubiesen ingresado aviones militares israelíes a espacio aéreo sirio.

Pero luego de recibir esta información de los servicios secretos franceses, la posibilidad de que en realidad hubiesen sido aviones F35 los que realizaron el ataque  resulta creíble, pues esas aeronaves disponen de tecnología furtiva de última generación, así como sistemas de guerra electrónica que enmascaran su huella radar a los sistemas antiaéreos enemigos anticuados.

Pero también hasta ahora no existe evidencia de que Siria posea sistemas antiaéreos  S-300, y mucho menos que exista la intensión de transferirlos a Hezbolá; en todo caso, si los poseyera serían utilizados para su propia defensa y no para transferirlos a Hezbolá.

Es cierto que Rusia tiene operativos varios sistemas antiaéreos  S-300 y S-400 en suelo sirio, y con toda probabilidad pudieron detectar el ingreso al espacio aéreo del país árabe de los F35 israelíes, pero también es cierto que hasta ahora Rusia se ha mantenido al margen del conflicto sirio-israelí,  y por lo tanto, de ser cierta esta información, los rusos no habrían hecho nada para impedir el ataque al aeropuerto; y es que no es la primera vez que Israel ataca impunemente las instalaciones militares y las fuerzas armadas de Siria, eso pese a la presencia de Rusia en la zona.  Eso es así porque existe un acuerdo entre Rusia e Israel para que el primero no interfiera en el conflicto entre ambos ( Siria e Israel). 

Aunque tal vez Rusia si avisó a las autoridades sirias del ingreso de los aviones F-35 israelíes, pero debido a la falta de recursos militares para impedirlo, a siria no le quedó otro remedio que solo mirar sin poder hacer nada, pues no tiene sistemas antiaéreos capaces de derribar los F-35 ni aviones caza interceptores con que hacerles frente.  Así que lo único que pudieron hacer fue retirar todo el personal de las instalaciones, así como los equipos militares que pudiera haber habido allí. Entonces, aunque Israel atacó el aeropuerto, probablemente no hubo bajas humanas ni material bélico destruido, eso gracias al aviso de Rusia.

Otro hecho qué podría darle credibilidad a estos informes, es la advertencia lanzada por Moscú a Israel en el sentido de que no permitirá de ahora en adelante que Israel agreda a Hezbolá en suelo sirio y libanés.   Esta información podría darle veracidad a los informes franceses en el sentido de que realmente había allí Sistemas antiaéreos S-300 con destino a Hezbola.

Otro dato significativo, son los ejercicios de simulación de ataque a las instalaciones estratégicas de Israel por parte de Hezbolá, utilizando para ello !precisamente sistemas antiaéreos rusos S300¡.

Uniendo todos los datos anteriormente expuestos, podría ser cierta la información y realmente Israel utilizó los aviones F-35 para intentar destruir sistemas antiaéreos rusos S-300 que serían entregados a Hezbolá.

Y también nos pondrían sobre aviso de los reacomodos geoestratégicos en la región, con una alianza Rusia-Hezbola-Siria-Irán.

Considerando todo esto, la posibilidad de un enfrentamiento militar entre Israel y Rusia se hace muy posible en un futuro no tan lejano.

También recuerdo que en algún momento se mencionó una alianza Rusa-Hezbolá, y todo esto sólo sería la confirmación.

Otra cosa que podemos deducir de lo anterior, es que este sería el bautismo de fuego para el avión estadounidense F-35; sería su primera intervención en un conflicto armado.

Los pilotos israelíes no son novatos en el uso del F-35, pese a que Israel posea los aviones sólo desde hace un mes, pues los pilotos israelíes se estuvieron entrenando en EEUU durante más de un año en el uso y manejo de los F-35, así que ya serian todos unos expertos en dicha aeronave.   También nos confirmaría que el avión estadounidense está listo para entrar en servicio operativo, no al cien por cien, pero sí ya sería operable y se confirmarían sus características furtivas, así como sus armas avanzadas.

Esto sin duda es una fuerte llamada de atención para Rusia y China, pues ambos solo hasta ahora han comenzado a operar sus respectivos aviones de quinta generación; Rusia acaba de recibir las primeras unidades plenamente operativas del SU-T50 y China acaba de declarar su J-20 listo para el servicio activo.

Creo estos hechos han obligado tanto a Rusia como a China a acelerar el desarrollo de sus respectivos cazabombarderos furtivos; aunque en el caso de China no sea del  todo cierto, pues sus aviones dependen completamente de los motores rusos , y la tecnología no ha sido completamente probada o testeada; pero ante el problema que representa el despliegue de los F-35 en Japón y Corea del sur, así como el despliegue del sistema estadounidense antimisiles de Defensa Terminal de Área a Gran Altitud (THAAD, por sus siglas en inglés), en Corea del Sur, los ha obligado a introducir el J-20 al servicio activo pese a no haber sido sometido a todas las pruebas necesarias, aunque no hay mejor prueba que utilizarlo en un teatro de operaciones reales.