Además, es capaz de fortalecer la capacidad de combate de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM). La aeronave heredó la composición aerodinámica del MiG-29 (uno de los cazas más populares de cuarta generación) que puede portar hasta siete toneladas de armas ya que es una máquina de combate óptima para conflictos de alta intensidad, además puede usar todo el espectro de armas existentes, incluso las más avanzadas y aquellas diseñadas especialmente para cazas pesados.
La experiencia de las guerras y los conflictos locales de las últimas décadas han demostrado que la confiabilidad, maniobrabilidad y la alta probabilidad de sobrevivencia en cualquier condición es la clave hacia el cumplimiento de las tareas de batalla de la aviación de combate.
Por ello, ha invitado a una treintena de países a probar los programas “off-set” que incluyen el uso de la base de aviación local, la formación de los especialistas, creación de puestos de trabajo adicionales, transferencia de tecnologías modernas, así como la realización de trabajos en conjunto de diseño, entre otras.
El nuevo avión, tiene un alto potencial de exportación. En la actualidad, hay 29 países alrededor del mundo que operan los aviones caza MiG-29. No obstante, su plazo de explotación caducará durante los próximos 5 a 6 años. Actualmente, la compañía rusa tiene una cartera de pedidos por un valor de 4 mil millones de dólares.
Bajo tales condiciones, es económicamente viable para estos operadores -incluyendo México- comenzar la transición hacia los nuevos modelos de aviones caza del mismo fabricante, ya que el nivel de adopción de los pilotos a equipos del fabricante pero más modernos representará menos costos de capacitación, así como todo personal técnico aeronáutico involucrado en la operación del equipo.
Es importante mencionar que México es un país bajo la Doctrina Estrada o tratado de no intervención, por lo cual, es una nación no bélica y que no será partícipe de ningún conflicto armado. La flota de aviones de la Secretaría de la Defensa Nacional, es con el simple objetivo de salvaguardar la soberanía nacional, apoyar en labores humanitarias, desastres naturales (Plan DN-III) y defensa contra el narcotráfico.
Este avión caza ha sido ofrecido a México por la corporación MIG. Vale recordar que el principal operador de aeronaves de la empresa rusa en América latina es Perú; y ése país está actualmente en platicas para hacerse con los servicios del Mig 35.
La opción que ofrece el fabricante ruso para participar en el desarrollo de la aeronave, así como la transferencia de tecnologías, lo hace muy atractivo para el país, dadas las pretensiones de México de fabricar sus propios aviones caza antes del año 2030.
Por otra parte, México es usuario de los helicópteros rusos Mil Mi-17. Y la Fuerza Aérea valora tanto sus MI-17 que recientemente envió 19 helicópteros a Novosibirsk, a la planta NARP, a recibir un mantenimiento mayor completo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario