El Krasukha-S4 fue creado para neutralizar los satélites espía, los radares terrestres y los sistemas aéreos. Para lograrlo, se generan señales de interferencia dirigidas a las principales frecuencias de radar y otras fuentes de radio.
El objetivo principal del complejo es proteger los puestos de control, las tropas y los medios de defensa antiaérea contra el reconocimiento aéreo y las armas de precisión.
Además, el Krasukha derrota con éxito a los drones que vuelan a altitudes extremadamente bajas. Los complejos de software y hardware del sistema son capaces de desactivar la aviónica del vehículo no tripulado, dejándolo ciego e indefenso. Esto obliga a la aeronave a ascender a una altitud mayor, haciéndola accesible a la defensa antiaérea rusa que destruye el objetivo.
Entre sus características únicas, de acuerdo con el experto ruso Román Nasonov, figuran:
La capacidad de generar interferencias de radio en una amplia banda de frecuencias sin restricciones en cuanto al azimut y el ángulo de localización.
Puede alcanzar eficazmente cualquier objetivo aéreo. El alcance del complejo es de más de 300 kilómetros.
Está montado en un vehículo todoterreno que puede operar en cualquier tipo de superficie, incluso a temperaturas entre -50 grados centígrados y +50 grados centígrados.
El Krasukha-S4 fue desarrollado en 2009 y su producción en serie comenzó en 2011.
Eficacia del sistema en los campos de batalla
El Ministerio de Defensa ruso publicó recientemente un video mostrando al Krasukha-S4 suprimiendo un dron de reconocimiento de las fuerzas ucranianas.
El organismo también citó a un miembro de la tripulación que afirmó que "a lo largo de la operación militar especial rusa, este sistema de guerra electrónica ha confirmado su eficacia". Añadió que cumplen su misión de combate con pleno éxito.
Junto a los vehículos aéreos no tripulados, el Krasukha-S4 también neutraliza de forma efectiva misiles balísticos y aeronaves adversarias, destacó el tripulante.
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