Pues hoy parece mas que evidente que así sera:
Polonia despliega armas nucleares de la OTAN en su territorio, mientras que Turquía busca una confrontación directa con Rusia derribando un avión suyo que iba desarmado, lo que equivale a una puñalada por la espalda, tal como lo afirmo Vladimir Putin. Claro, Turquía se atreve a tanto pues se siente arropada, protegida, por la OTAN; y así se lo han hecho saber y sentir las autoridades de la alianza atlántica y los EEUU precisamente para ello, para motivar la agresión turca a Rusia, y eso con el fin de desatar la tercera guerra mundial.
Como se los he advertido: Oren por sus hijos mayores de 18 años y por sus maridos y padres, por que hay una posibilidad real de que sean enviados a la guerra pronto.
Mi buen amigo y hermano Enrique. Desde hace un tiempo para acá -en tu excelente blog- ya publicabas, artículos relacionados a la Tercera Guerra Mundial.
ResponderEliminarEn el instante recuerdo uno de tu lista de blogs amigos y favoritos, el del Católico Memorándum Profético, que hizo un compendio de varias profecías acerca de este conflicto; y, como que ya tal parece se hacen una realidad indiscutible.
Como que a partir del 2016, las cosas no pintan bien. Lo contrario se agudizan y en una aparente neutralidad o de falsa paz. ¡El drama esta aterrador! Por no decir más. Y añado, a tus palabras: ¡Que todos vayamos pensando en un refugio Anti-Nuclear, haber si mitigamos el holocausto que llega! Francamente este mundo es un fracaso. Su civilización no fue capaz de sortear ni el odio y ni el egoísmo. ¡Que vergüenza! Así es y desde donde se le vea y sin ser fatalistas o pesimistas.
Es la pura verdad. La cruda realidad al 100% ¡Increíble! Los informes por cada semana, son peores. Nada prometedores y si bastantes confirmados y desde donde se les vea.
Ahora, nos queda: ¡Sálvese quien pueda ya! Saludos a todos. Que Dios nos ayude y protega a muchos. Cuiden a sus hijos por las pesadillas que vienen en todos los continentes.
Éxitos. Estos no son cuentos. Están definitivamente ocurriendo frente a nuestras narices. Ahora son disuasiones. Pero después ya no lo serán. Amén.