Manifestantes puertorriqueños rechazan el colonialismo estadounidense. |
El Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) ejercerá mayor presión a nivel internacional para allanar el camino hacia la independencia de la isla de EE.UU.
Así lo ha anunciado este miércoles la vicepresidenta del PIP, la senadora María de Lourdes Santiago, días después de que Donald Verrilli, procurador general estadounidense, dejara entender que Puerto Rico sigue siendo una colonia.
El Estado Libre Asociado (ELA) es moralmente repugnante (…) El que diga a los puertorriqueños que hay una posibilidad real de recuperación económica bajo el ELA es un irresponsable político porque eso es absolutamente falso (...) Creemos que este es el escenario perfecto para mover a nivel internacional esa presión hacia los Estados Unidos”, afirma María de Lourdes Santiago, vicepresidenta del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP).
La vicepresidenta del PIP ha afirmado que el primer paso para lanzar dicha campaña será comunicar los “nuevos acontecimientos” a varios organismos internacionales a los que ha descrito como “aliados”.
“Por aliados me refiero a organismos como la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), la Internacional Socialista y la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de la América Latina”, ha explicado.
María de Lourdes Santiago, vicepresidenta del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP). |
El PIP pondrá además en marcha un proceso de diálogos con líderes latinoamericanos que, por su carácter individual, ejercen una gran influencia en la región, así como con países amigos, como Cuba, ha precisado la senadora independentista sobre los planes anticolonialistas de su partido.
“Nos comunicaremos además con otros sectores del independentismo para que hagan lo propio con los aliados y organismos internacionales que han cultivado y a los que pertenecen”, ha agregado.
Santiago se ha mostrado confiada en que tales esfuerzos y planes, que se duplicarán en el venidero año 2016, propicien condiciones que faciliten un proceso de descolonización y que culminen con la independencia de la Isla de las manos de Washington.
EE.UU. invadió el actual territorio de Puerto Rico en 1898 prometiendo a su pueblo libertad y democracia. Las promesas no se cumplieron y, aunque en 1952 se estableció una peculiar forma de administración denominada ‘Estado Libre Asociado (ELA)’, Puerto Rico sigue colonizado y se espera que se anexe a EE.UU. en enero del 2021.
“El Estado Libre Asociado (ELA) es moralmente repugnante (…) El que diga a los puertorriqueños que hay una posibilidad real de recuperación económica bajo el ELA es un irresponsable político porque eso es absolutamente falso (...) Creemos que este es el escenario perfecto para mover a nivel internacional esa presión hacia los Estados Unidos”, ha recalcado Lourdes Santiago en referencia a la crisis económica que, según los expertos, tiene sus orígenes en decisiones tomadas en Washington.
El presidente del Senado de Puerto Rico, Eduardo Bhatia, sostuvo el pasado viernes que es momento de preparar al país para un cambio en su relación política con EE.UU., un cambio que brinde estabilidad política y poder democrático al pueblo de Puerto Rico, además de dignidad incuestionable.
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