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martes, 13 de diciembre de 2016

Las cinco armas rusas más temidas por la OTAN según National Interest



La publicación militar estadounidense, National Interest, ha nombrado las cinco armas del Ejército ruso que más miedo causan a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

Iskander

De acuerdo con los expertos de la revista norteamericana, los misiles tácticos Iskanderocupan el primer lugar en la lista de los temidos equipos militares rusos.

El dispositivo, con un alcance de 400 kilómetros y una ojiva —parte delantera del misil, donde se ubica el material explosivo— de 700 kilogramos, tiene una desviación máxima de solo cinco metros. Además, su sistema de control permite reorientar el proyectil durante el vuelo y, así, acertar objetivos en movimiento.

"Si son posicionados en Kaliningrado —enclave ruso en Europa—, los misiles balísticos Iskander podrían amenazar a una amplia gama de blancos militares y políticos de la OTAN", señaló el medio.

Su-27



En segundo lugar, se encuentra el caza polivalente de cuarta generación, Su-27. Según National Interest, la aeronave combina una aterradora velocidad, con maniobrabilidad y largo alcance. El medio consideró los Su-27 una "plataforma letal".

Misiles S-400 Triumf



De acuerdo con National Interest, las principales características mortales de los sistemas de misiles antiaéreos S-400 Triumf son su precisión en derribar misiles balísticos enemigos y también su movilidad, que les permite ser emplazados rápidamente en cualquier tipo de operación militar.

Submarino Akula



Los submarinos de ataque propulsado mediante energía nuclear de la Clase Akulatambién pueden generar gran preocupación a los países de la Alianza Atlántica.

"Los Akulas llevan una enorme variedad de armamento, incluyendo torpedos y misiles de crucero. Estos misiles pueden atacar tanto objetivos marinos como terrestres, lo que pone en riesgo una gran parte de la costa de —los países de— la OTAN", consideró la revista.

Fuerzas Especiales



La quinta arma más peligrosa de Rusia no es un equipo militar, sino las Fuerzas Especiales del país. Los expertos occidentales consideran a los soldados de la fuerza élite como "una de las herramientas más eficaces en el arsenal ruso" y consideran que esos oficiales son "un instrumento político-militar impresionante, capaz de causar un impacto en todas las áreas de una guerra".

Mientras tanto Rusia niega cualquier acusación de agresión y califica de provocativa la presencia incrementada de las fuerzas de la OTAN cerca de sus fronteras.


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