La táctica de usar camuflaje para los buques de guerra rusos se ha convertido en un desafío para los analistas en el campo de la identificación. Los expertos señalan que debido al repintado de la proa y la popa de los buques de guerra rusos, se ha vuelto difícil identificar el modelo de buque a partir de imágenes satelitales disponibles públicamente.
El repintado de barcos crea distorsiones en las imágenes satelitales, lo que hace que el tamaño real de los barcos sea más pequeño. Por ejemplo, la fragata "Almirante Makarov" tiene una longitud de 124,8 metros, pero las imágenes satelitales muestran solo 90 metros debido al uso de camuflaje.
En general, este enfoque no creará problemas significativos para la inteligencia militar profesional, ya que tienen acceso a un mapeo satelital mejor y más preciso. Sin embargo, pueden surgir problemas para los analistas involucrados en fuentes abiertas de información (OSINT) y, a menudo, transmiten información al ejército ucraniano.
Los profesionales de OSINT a menudo utilizan recursos gratuitos para analizar imágenes satelitales, que pueden no tener la precisión y calidad necesarias para identificar adecuadamente los objetos. Debido a esto, el camuflaje utilizado por las fuerzas navales rusas puede ser realmente un medio eficaz para dificultar la identificación de los barcos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario