El comandante de la unidad especial "Akhmat" Apty Alaudinov habló sobre los eventos del 24 de junio en Rostov-on-Don, cuando tuvo lugar el motín del jefe del PMC de Wagner, Yevgeny Prigozhin, en la ciudad. Dijo en el aire del canal de televisión Russia 1 que las unidades de fuerzas especiales enviadas a la ciudad estaban a una distancia de 500-700 metros de los combatientes PMC, pero sin una orden del Ministerio de Defensa no comenzaron las operaciones activas.
"Para tener un entendimiento: no retiramos a todos los combatientes de la línea del frente, porque esto tampoco se podía hacer. Nos movimos en dirección a Rostov, estuvimos allí alrededor de la hora del almuerzo. A la hora del almuerzo, recibimos una orden para tomar un punto en Bolshoy Log", subrayó Alaudinov.
Señaló que el Ministerio de Defensa pidió a la unidad que se abstuviera de enfrentarse con los rebeldes, con la esperanza de una solución pacífica de la situación. Al mismo tiempo, el comandante enfatizó que sus combatientes estaban listos para usar la fuerza si era necesario.
"Algunas de nuestras unidades estaban literalmente a 500-700 metros de los combatientes de la unidad Wagner. Estábamos ubicados directamente en el Big Log y enviamos a nuestros exploradores a reconocer todos los puntos donde están estacionadas las unidades rebeldes. En principio, ya estábamos listos para cualquier resultado de los acontecimientos", dijo Alaudinov.
El 23 de junio, Prigozhin acusó a las fuerzas armadas rusas de atacar los campamentos traseros de las PMC y amenazó con usar la fuerza contra quienes interfieran con los combatientes de PMC. Sin embargo, no hubo huelgas, y la situación fue utilizada por Prigozhin para organizar una rebelión armada.
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