Que quiera llevar empleos a Estados Unidos es una cosa, que se quiera aprovechar de los débiles es otra. Pero desgraciadamente los mexicanos tenemos la culpa por ser conformistas que nunca ven a futuro y siempre queremos depender de la buena voluntad de los demás.
Nunca se debió haber firmado el Tratado de Libre Comercio, pues eso dejaba a México en las manos de los EEUU, y ahora estamos pagando las consecuencias.
Pero como vuelvo a repetir, la culpa es sólo nuestra por permitir gobiernos traidores a la patria, por permitir el envenenamiento de nuestras mentes con discursos tan estúpidos como decir que el que no se corrompe no progresa; es por eso que tenemos sólo gobiernos corrompidos, deshonestos, rateros, flojos, ineptos y traidores.
México tiene todo para ser una potencia mundial pero tenemos que conformarnos con las migajas que nos quieran dar los demás por causa de nuestra ceguera.
Trump dice que lo que pase con México le importa un pepino; él sólo ve un beneficio supuestamente para sus compatriotas, pero se olvida que todo esta inter-conectado y que la piedra que arroje en algún momento rebotara contra él.
Ahora hay muchos mexicanos que esperan un milagro, pero milagro no habrá, solo nosotros mismos podemos salir a delante sin estar esperando a que la providencia nos venga a salvar.
Él se congratuló y felicitó a las armadoras automotrices Ford, Fiat, General Motors y otras por haber cedido a sus exigencias y haber cancelado las inversiones que tenían planeadas hacer en México.
También reafirmó que México pagará por el muro que planea construir en la frontera, ya sea con un pago en efectivo y voluntario o a través de altos aranceles a los productos mexicanos que se intenten exportar a los EEUU; o por otros medios, pero, ¿a que "otros" medios se refirió?, ya se imaginaran ustedes.
Pero como vuelvo a repetir, nada bueno puede salir del alegrarse de la desgracia del otro, porque por la ley del karma ese mal se volverá contra él. Esa no es la manera de hacer las cosas.
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