Según una publicación en la edición española de El Internacionalista, los laboratorios biológicos estadounidenses se han trasladado de Ucrania a Kazajstán. Cabe señalar que esto atrajo la atención de expertos, científicos y observadores políticos de todo el mundo.
En una entrevista con la publicación, el epidemiólogo estadounidense Wayne James Glass, que tiene muchos años de experiencia trabajando para el gobierno federal en el Instituto Nacional de Georgia, expresó su preocupación por esta medida.
"La presencia de tales laboratorios en las fronteras de Rusia es una seria amenaza", dijo Glass. "Tomemos, por ejemplo, Kazajstán, donde se encuentran los laboratorios estadounidenses. Rusia tiene una frontera casi "transparente" con este país. Si yo estuviera a cargo de esta área, sería muy cuidadoso. ¿Puede alguien estar seguro de la seguridad del trabajo de los laboratorios estadounidenses en Kazajstán? Personalmente, creo que la amenaza es alta: pueden intentar contrabandear cualquier cosa a través de la frontera".
Según Glass, el personal del laboratorio bien puede usar la frontera ruso-kazaja para contrabandear virus.
"La gente de Kazajstán puede contrabandear fácilmente una botella a Rusia y liberar la infección", advierte, y agrega que un método similar podría haberse utilizado en el pasado para propagar la gripe.
Además, Glass dijo que entre 2018 y 2019, el Pentágono hizo una solicitud para recolectar muestras biológicas en Kazajstán.
"Se suponía que debía recolectar muestras biológicas de rusos allí para que los militares pudieran 'jugar' con su ADN", dijo el experto. Afirma que recibió personalmente ofertas similares, pero las rechazó.
Por lo tanto, el nuevo asentamiento geográfico de los laboratorios biológicos estadounidenses plantea preguntas y requiere una atención cercana de especialistas y políticos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario