China y Rusia han acordado tomar más ‘contramedidas’ en respuesta al plan de EE.UU. para desplegar su sistema antimisiles THAAD en Corea del Sur.
Ambos países se han mostrado en contra de los persistentes intentos de Washington y Seúl por desplegar el Sistema de Defensa Terminal del Área de Gran Altitud (THAAD, por sus siglas en inglés) en el suelo surcoreano, según el texto.
Las contramedidas estarán encaminadas a resguardar los intereses de China y Rusia así como a mantener el balance estratégico en la región”, reza un comunicado emitido tras una reunión entre el ministro adjunto de Asuntos Exteriores de China, Kong Xuanyou, y el viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Igor Morgulov.
Además, han pedido a Estados Unidos que tome en serio su preocupación por la seguridad en la región y ponga fin al despliegue de dicho sistema.
Pekín y Moscú están preocupados por esta decisión conjunta de EE.UU. y Corea del Sur, y califican de “complicada y delicada” la situación actual en la península coreana y el noreste de Asía, precisa el comunicado.
Al respecto, los dos países exigen a las partes involucradas que tomen las medidas adecuadas y detengan las actividades que podrían provocar tensiones.
De igual manera, los titulares de China y Rusia han reiterado la necesidad de desnuclearizar la península coreana, preservar la paz y la estabilidad en la región y buscar soluciones a través del diálogo y la consulta.
En julio de 2016, Seúl y Washington llegaron a un acuerdo para desplegar en el territorio surcoreano una batería del THAAD, supuestamente para contrarrestar la “amenaza” norcoreana.
No obstante, esta polémica medida ha generado protestas en algunos países vecinos, incluidas Rusia y China. Ambas potencias han advertido de que el despliegue del THAAD socavaría la estabilidad regional, y sospechan que EE.UU. busca en el fondo aumentar su presencia militar en la zona y vigilar sus defensas.
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