Los altos precios del combustible matarán a más europeos este invierno que los que han perecido en el campo de batalla de la guerra de Ucrania, según un informe.
En un nuevo análisis, en que se considera la energía como “el arma de Rusia”, el semanario británico The Economist modeló el sábado el efecto del aumento de los precios de la electricidad en las muertes durante el invierno y advirtió de que “con los precios de la electricidad cerca de sus niveles actuales, alrededor de 147000 personas más (un 4,8 % más que el promedio) morirían en un invierno típico”.
En un invierno especialmente duro podría ascender a 185000, pero, aunque sea un invierno suave, la cifra seguiría siendo 79000.
El análisis nombró la gravedad de la temporada de gripe y las temperaturas y los precios de la energía como los principales factores que afectan la cantidad de personas que morirán en Europa fuera de Ucrania este invierno.
El número de soldados que se cree que murieron en Ucrania se estima en 25000 a 30000 por cada bando.
El sábado, la portavoz de la Cancillería de Rusia, María Zajárova, culpó a los líderes europeos de “llevar a Europa, precisamente a la Unión Europea (UE), a un colapso energético global” aseverando que ahora tendrán que convencer a sus ciudadanos que la situación actual corresponde a sus intereses.
La semana pasada, el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, advirtió que si la guerra de Ucrania no termina antes de que llegue el próximo invierno, el sector energético de Europa se enfrentará a riesgos más graves que los de este año.
Como resultado del aumento de las sanciones occidentales sobre Rusia, el precio del gas y la electricidad para las casas residenciales en Europa ha aumentado significativamente. Antes de la guerra, Rusia suministraba entre el 40 y el 50 % del gas natural de la Unión Europea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario